27 Sep Una casa se abre al jardín

Una casa se abre a su jardín

Hoy presentamos uno de los proyectos más celebrados que hemos realizado en nuestra oficina de arquitectos en Sitges. Realizamos una reforma integral de una tradicional casa de veraneo de los años 50, ubicada en el barrio de Vinyet, Sitges. Nos encontramos con una propiedad avejentada, incapaz de responder a los estándares de sus nuevos dueños. Las habitaciones estaban desconectadas entre sí y no tenían relación alguna con el exterior del hogar. Nuestro desafío fue reconfigurar los espacios y proponer nuevas soluciones que se adapten al estilo de vida de nuestros clientes. Rediseñamos la arquitectura interior de ambas plantas, mejorando el uso de los ambientes poniendo especial énfasis en reconectar la casa con su jardín. En la planta baja, construimos un porche como elemento de transición entre el afuera y el adentro. Inspirados en las persianas tradicionales del Mediterráneo, diseñamos una reja corredera para filtrar la luz proveniente del Oeste. Sobre el mismo porche y en la planta superior, un deck privado conectado a la suite principal.

Recibimos un proyecto que tenía como objetivo renovar una antigua casa en Sitges, Barcelona. Desde el inicio, los clientes plantearon una serie de requisitos emocionales y funcionales. Deseaban espacios dinámicos y fluidos, capaz de adaptarse a distintas situaciones cotidianas, pero sobre todo sin perder el encanto original de la casa. Se propuso repensar y conectar el interior del hogar con el exterior y su jardín.

Desde lo estructural, la casa original tenía problemas de capilaridad, había espacios obsoletos, cuartos pequeños y carecía de baños. Vaciamos el interior y reforzamos la estructura para liberar particiones indeseadas. Así pudimos adaptar la totalidad de la vivienda a los usos y costumbres de los nuevos dueños. Uno de sus principales deseos era poder cocinar, compartir y disfrutar la vida al aire libre. Para alentar el encuentro, diseñamos una cocina con una conexión fluida con el comedor interno y el área de estar del porche. Se implementaron materiales como el granito y el nogal para sumar calidez y una chimenea como punto de encuentro. Grandes ventanales hacia el jardín, para sacar máximo provecho de la luz natural. Conservamos la forma original de la escalera para mantener el encanto y en el exterior las tejas para preservar su identidad.

Inspirados en el Mediterráneo, diseñamos junto a artesanos cualificados una reja que embellece y crea espacio mientras protege a la casa de la luz del sol. Los tres módulos de la reja ofrecen un juego estético cuando tamizan la luz. En el jardín, creamos un proyecto de paisajismo que incluyó piscina y especies locales típicas del Mediterráneo.

En la planta de arriba, se propuso redistribuir cuatro antiguos dormitorios en una gran habitación ensuite con terraza y dos habitaciones para invitados con su justa proporción. Esta decisión nos permite separar la vida privada de la vida social, destinada a la planta inferior.