Situada en el barrio de Terramar en Sitges, la villa ejemplifica la fusión perfecta entre el encanto tradicional y la funcionalidad moderna. La villa, originalmente construida en el siglo XX, ha sido cuidadosamente renovada por Rardo Architects para satisfacer las necesidades de una familia contemporánea, respetando al mismo tiempo la identidad arquitectónica original del edificio. El resultado es un hogar bellamente actualizado que conserva el carácter del pasado, realzado por una estética fresca y moderna.
Reforma de una villa tradicional | TERRAMAR
La renovación se abordó con un profundo respeto por las características tradicionales mediterráneas de la villa. Al mismo tiempo, el diseño introduce líneas limpias, materiales contemporáneos y tecnología de última generación, garantizando comodidad y eficiencia para la vida moderna.
El espacioso interior ha sido completamente reimaginado, con una distribución de concepto abierto que maximiza la luz natural y las vistas a la vegetación circundante y al Mar Mediterráneo. Se logra una conexión fluida entre el interior y el exterior mediante amplias ventanas, que permiten un fácil acceso a las terrazas ajardinadas, el jardín y la zona de piscina.
El corazón de la casa es el área de estar, comedor y cocina, diseñada para ser funcional y acogedora. La cocina moderna cuenta con los últimos electrodomésticos de alta gama y un diseño elegante, manteniendo al mismo tiempo un ambiente cálido y acogedor para la vida diaria. Una selección cuidadosamente curada de materiales, que incluye piedra natural, madera y acero, aporta un toque sofisticado pero relajado al espacio.
natural, madera y acero, aporta un toque sofisticado pero relajado al espacio.
En la planta superior, la villa cuenta con habitaciones amplias, cada una diseñada para ofrecer comodidad y privacidad. La suite principal es un verdadero refugio, con grandes ventanales que enmarcan hermosas vistas y proporcionan una sensación de tranquilidad. Los baños están equipados con acabados de alta gama y accesorios modernos, equilibrando la estética con la practicidad.
La inclusión de una nueva piscina, rodeada de exuberante vegetación, añade un toque de lujo mientras mantiene la conexión de la villa con sus raíces mediterráneas.
Esta villa renovada en el barrio de Terramar representa el equilibrio perfecto entre preservar la historia y adoptar la modernidad. Un ejemplo perfecto de restauración arquitectónica pensada que integra lo mejor de ambos mundos: respetando el pasado y mirando hacia el futuro.
