Se preparó una propuesta de actuación en la que se desarrollara una nueva distribución de las habitaciones existentes, manteniendo su número, pero con mejoras de manera que pudieran dar un servicio más completo a los clientes que se alojaran en ellas.

Cada una de las nuevas habitaciones cuenta con más y mejores servicios, incluyendo un pequeño espacio de trabajo incorporado en el nuevo concepto de armario abierto, realizados en maderas naturales de alta calidad. A estos se suman que las dos habitaciones principales con vistas al mar se replantean como mini suites con hidromasaje incorporado en las habitaciones. Tanto el material de pavimento como el revestimiento de las paredes se adapta a las necesidades de cada rincón, usando Krion para crear un forro y zócalo que permita el uso de las bañeras sin necesidad de preocuparse por dañar la pintura.

Trabajamos también con la propiedad para crear un salón polivalente en Planta Baja, juntando dos de los antiguos salones para generar una nueva estancia, equipada con chimenea de gas, muebles en madera de roble y lacado diseñados a medida por nuestro equipo y una iluminación acorde, separados del resto del hotel por unas grandes puertas de metal y vidrio, que combinan amablemente con la otra decoración del hotel.

Nuestro trabajo incluyó la elección de una serie de paletas de tonos claros combinados con materiales naturales de consistencia sólida para garantizar una buena durabilidad del local, que sobrevivieran con gracia y elegancia en el tiempo.